El otro día hice un curioso ejercicio mental que les aconsejo. ¿Listos para pensar? Bien, sigan estos sencillos pasos:
- Desembarácense por un momento de su educación social y también de su educación moral.
- Dejen intacta la moral que traían de serie, con la que ya nacieron, y por supuesto sus instintos.
- Ahora piensen en nuestro planeta y en todos los seres que lo poblamos y fíjense en su armonía intrínseca.
- Visualicen concretamente algún mamífero que les guste especialmente por la razón que sea, su estética, su poderío físico, la inteligencia de su cara, etc. Esto de que les guste es para potenciar el efecto perseguido y para lograr que se olviden mejor de su educación social (yo pensé en un leopardo).
¿Hasta aquí todo bien? Perfecto, seguimos:
- Ahora imagínense a un humano que siente un deseo irresistible de matar a ese animal, o de torturarlo y matarlo, y además ese deseo lo siente por el puro placer de hacerlo, por diversión de él mismo o de otros observadores, sin que tenga ninguna necesidad básica, como alimentarse o defenderse.
La pregunta es: ¿Cómo aprecian este comportamiento humano?
Yo digo que ese alguien está profundamente enfermo, es un psicópata que carece de empatía con el medio, digo que es un "error" de la naturaleza y debe ser considerado como tal, tratado médicamente de alguna forma al igual que tratamos otros desórdenes mentales. Esta es una más de las locuras aceptadas por una humanidad enferma.
Estoy firmemente convencida de que si no llegaron a la misma conclusión que yo seguramente no siguieron bien la primera parte de las instrucciones. La otra opción es que también estén enfermos.
Yo no necesito hacer el primer ejercicio mental me parece una salvajada desde ya...
ResponderEliminar¿Y el que se lleva a su hijo menor a cazar?
ResponderEliminar(por cierto, seguro que cuando su hijo no podía levantar un arma, le enseñaba libros de impresionantes, preciosos, inteligentes... y VIVOS animales).
Petufir
Ya suponía que tú Pulga no tenías que hacer el ejercicio previo.
ResponderEliminarPues el que se lleva su hijo a cazar yo creo que podría ser doblemente peligroso, porque no conformándose con ser él un salvaje encima quiere enseñar el innoble arte a un niño indefenso. Penoso.
Y algunos llegan a llamarlo "deporte" ....
ResponderEliminarSiii, ¡es el colmo del surrealismo! Es como si en las olimpiadas hubiera por ejemplo la especialidad de tiro con arco al bebé y todos tan contentos(menos los padres de los bebés claro) y no pasara nada. Pensadlo así!
ResponderEliminarSin duda es el mejor post que has hecho Cyllan...
ResponderEliminarJajajaj, pero tú no has hecho el ejercicio ¿no?
ResponderEliminarYo no, pero lo del ejercicio era muy sútil, por eso me ha parecido que la creación de este post ha sido de lo mejor.
EliminarJej, sí supongo que si a los cazadores los llamo directamente tontos o enfermos o las dos cosas hubiera sido menos sutil, y menos efectivo ;)
EliminarSiempre pensé que sobran los matarifes con escopeta.
ResponderEliminarBuen finde.
Sobrar sobran claramente, no reporta nada interesante a este mundo que haya psicópatas en él.
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